SAMIR WESAYT
Frases paralelas, también llamadas binomios, que constituyen la base de la versificación bíblica. La poesía hebrea clásica, sobre todo la lírica, se basaba en la acentuación de intensidad y el paralelismo: a una frase con un contenido concreto, le seguía otra que repetía, con variaciones formales, el mismo concepto. Lo hacía a través del uso de palabras sinónimas y de equivalencias fónicas similares a la aliteración.
El Líbano no basta para leña,
sus fieras no bastan para hostias.
Isaías, 40, 16.
A veces, los versículos paralelos se pueden presentar también en forma de antítesis:
mis siervos comerán,
vosotros tendréis hambre,
mis siervos beberán,
vosotros tendréis sed,
mis siervos gozarán,
vosotros seréis confundidos.
Isaías, 65.